–Gracias –dijo ella sonrojándose al tocar sus suaves manos mientras se le aceleraba el corazón mirando su sonrisa.
Daichi repitió la operación. Karumi posó con delicadeza su mano en la de él y, para su asombro, el chico se llevó la mano a los labios y la besó tiernamente durante unos cortos segundos."
"–Hasta mañana –dijo Daichi acercando sus labios a los de Karumi.
–Deberías tener cuidado por donde pasas tus labios. Te recuerdo que no sabes mis poderes –le advirtió ella intentando disimular su nerviosismo."
"–¿Por qué no me llevas levitando? Peso mucho, no podrás conmigo todo el camino sin antes romperte tú también algo –dijo agarrándose con cuidado a su cuello.
–Te lo creas o no, es la primera vez que levito algo más pesado que un caldero. Y no pesas tanto. De todas formas, aunque pudiera llevarte levitando, preferiría llevarte en brazos.
–¿Y eso? –dijo ella con un tono pícaro mientras jugaba con los mechones rubios del muchacho.
Daichi no respondió.
–¿No estás cansado? Se supone que si levantas cosas pesadas, te cansas y además me estás llevando en brazos.
–Ya te lo dije, no pesas tanto. Si llegas a ser un árbol o una casa, si estaría cansado, supongo. Lo averiguaré cuando levante algo de eso –rió.
Ambos quedaron en silencio hasta llegar a la cabaña. No estaba lejos pero Daichi optó por ir despacio."
"–Será… –dijo ella intentando soltarse el pie de las ramas.
–Eh… ¿hola? –dijo él con cuidado.
–¡AH! –dijo Sakura cayéndose del árbol.
–¿Estás bien?
Kenshin corrió hasta Sakura y la ayudó a levantarse.
–Sí, gracias –dijo agarrada a su cuello mirando a sus marrones ojos.
–Me alegro.
Se quedaron así un par de segundos.
–Creo que debería irme, mi hermano me estará esperando para seguir entrenando –dijo Sakura sin apartar sus brazos.
–Para poder irte, primero tendrás que soltarme –rió él."
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